El proceso 1001 y el fin de los proyectos de huelga general revolucionaria antifranquista
- Escrito por Abdón Mateos
- Publicado en Opinión

Con ocasión del próximo cincuentenario del juicio contra la dirección de Comisiones Obreras, conocido como proceso 1001, se va a inaugurar, dentro de las políticas de memoria democrática, una exposición en la Biblioteca Nacional comisariada por Carme Molinero, presidenta de la asociación de historia contemporánea. El juicio, iniciado el 20 de diciembre de 1973, tuvo una significación decisiva para la fase final de la dictadura franquista, pues coincidió con el asesinato del presidente del gobierno, almirante Carrero Blanco.
Desde 1970 se había forjado la unidad de acción del antifranquismo tras años de guerra de la izquierda debido a la herencia de la guerra civil. A partir de entonces, hubo conversaciones para la creación de la plataforma democrática que reuniera a la oposición moderada con las fuerzas del antifascismo histórico sin la exclusión de los comunistas y la nueva izquierda radical. Exponentes regionales de esa unidad de acción fueron la creación de la Asamblea de Cataluña o el Fondo Unitario de Solidaridad Obrera Antifascista en Asturias. No se logró una única postura de cara a las elecciones sindicales de 1971 pero toda la oposición obrera salvo el dominante PCE defendió la abstención.
En el País Vasco la protesta obrera había dado lugar en 1973 a la creación de una plataforma unitaria reivindicativa entre UGT, CCOO y USO, que trajo consigo la detención de los líderes socialistas, Nicolás Redondo, y comunistas, como Tomás Tueros. En ese contexto, también habían sido detenidas las direcciones de USO y de CCOO en 1972. Los dirigentes de CCOO habían ido detenidos en una reunión donde debatían el futuro de la unidad sindical tras la liquidación del Sindicato Vertical y el final del franquismo. Ello dio lugar a una campaña en solidaridad con los dirigentes de CCOO que se conocería como el proceso 1001.
La campaña de solidaridad tuvo dos vertientes adicionales. Por un lado, UGT y USO, sin dejar de solidarizarse con Comisiones, quisieron también extender hacia sus organizaciones las campañas de solidaridad contra la represión de sus dirigentes, a pesar de estar ambas organizaciones inmersas en un proceso de reestructuración después de crisis internas y escisiones. De este modo, en el verano de 1973 el último congreso de UGT en el exilio contó con la asistencia de delegaciones de USO, y Redondo fue confirmado como primus interpares del sindicato, además de desempeñar la secretaría política del PSOE.
Por el otro, las concertación unitaria antifranquista entre la oposición obrera llevó a realizar un proyecto de huelga general con ocasión del comienzo del proceso contra la plana mayor de Comisiones Obreras. A estas reuniones en Madrid asistieron representantes de la izquierda radical, que incluía a nuevas formaciones procedentes de ETA como el Movimiento Comunista. El representante de la UGT y del PSOE apoyó el proyecto de huelga general siempre que ETA no utilizara la violencia. Sin embargo, ETA siguió con sus planes de hacer coincidir la huelga general con un atentado mortal que convirtiera el día en una situación prerrevolucionaria. No parece que terminaran avanzando los proyectos de una huelga general, pero lo interesante es que todavía en 1973 se planteara esa posibilidad de movilización que había constituido un mito antifranquista desde la convocatoria sin éxito por el PCE de la Huelga Nacional Pacífica en 1959.
Finalmente, el inicio del juicio contra CCOO coincidió con el atentado mortal contra el presidente Carrero Blanco sin que la oposición obrera se lanzase a la huelga general. Se podría decir que el atentado a primeras horas de la mañana del día provocó una reacción de miedo, paralizando también las acciones de solidaridad en el espacio público .A pesar de la conmoción por el asesinato de Carrero Blanco, Marcelino Camacho fue condenado a veinte años de prisión, mientras que otros dirigentes se quedaron con pena de entre 17 y 12 años. Las penas serían rebajadas un año después. Por su lado, Nicolás Redondo y la dirección de USO vieron postergados sus procesos en el Tribunal de Orden Público, aunque el líder socialista fue despedido de la fábrica, quedando liberado por la organización, decidiendo dedicarse a la reorganización de UGT.
La reacción franquista trajo consigo amenazas de represión generalizada contra los dirigentes obreros, siendo detenidos socialistas como Joaquín Jou Fonollá dirigente del PSOE en Cataluña y muchos otros. No hubo una represión generalizada y no se promulgó el estado de guerra como pedían algunos franquistas, pero el antiguo director de policía, Carlos Arias Navarro, terminó siendo nombrado presidente del gobierno franquista, lo que contentó a los duros del régimen, que pronto serían conocidos como el bunker.
No hubo nuevos proyectos de huelga general revolucionaria, salvo en el País Vasco donde a finales de 1974 hubo una convocatoria con bastante éxito. No obstante, en 1974 se creó la Junta Democrática con secciones en muchas localidades y centros universitarios, mientras que el PSOE, los nacionalistas vascos y la oposición moderada comenzaron a preparar la Plataforma de Convergencia Democrática, que incluiría en 1975 por primera vez a organizaciones de la izquierda radical.
Abdón Mateos
Abdón Mateos López (Madrid, 1960) es un historiador español. Catedrático de Historia Contemporánea en la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED) en Madrid, dirige el Centro de Investigaciones Históricas de la Democracia Española y la revista semestral Historia del Presente. Fundador y presidente de la Asociación de Historiadores del Presente desde el año 2000.
Desde el año 2007 es responsable en la UNED de la Cátedra del exilio. En el año 2008 obtuvo la acreditación nacional de Catedrático de Historia Contemporánea. En el año 2009 obtuvo un segundo año sabático en Roma en la Universidad LUISS, financiado con la convocatoria nacional de Movilidad, y la Universidad de Las Palmas.
Actualmente dirige el proyecto de la Cátedra del Exilio (2011-16, patrocinado por el Banco de Santander) Emigrantes y exiliados en América después de la guerra civil. La construcción de una ciudadanía democrática, así como el proyecto de investigación del Ministerio (2012-16) "Historia del PSOE. Construcción del partido y reformismo democrático, 1976-1990".
Fue secretario general de ASU en Madrid.
Ha publicado recientemente Historia del PSOE en transición. De la renovación a la crisis (Madrid, Sílex, 2017).
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