2020, el año más difícil
- Escrito por Paco Robles
- Publicado en Opinión
Quizás algún día diremos sobre el año 2020 (que ya se acerca a su fin) que le recordó a la gente la debilidad de su propia naturaleza.
Éramos tan prepotentes, los seres humanos tan importantes que reinábamos sobre la naturaleza y la vida… Estábamos tan acostumbrados al progreso que las grandes epidemias sólo aparecían en nuestra memoria: la peste en la Edad Media, la gripe española hace cien años. El Sida que ya no mata, el Ébola que nos queda tan lejos, pero el Coronavirus no es ni lo uno ni lo otro.
Pero el virus es lo suficientemente contagioso como para que alrededor de la mitad de la humanidad se encontrara en algún tipo de confinamiento o bloqueo en febrero y con su máxima virulencia en abril. Ninguna enfermedad ha afectado tanto la vida cotidiana en todo el mundo en generaciones. El hombre moderno, que pensó que ya había subyugado la tierra, tuvo que inclinarse ante un patógeno que recientemente ni siquiera conocía.
En tiempos más piadosos, esto se habría tomado como una señal del cielo, hoy la gente pelea entre el gobierno o la ciencia.
Los españoles con su gran esperanza de vida y una comunidad de mayores y ancianos en residencias particularmente en riesgo, abordaron la crisis en la primavera, como corresponde a su naturaleza: con miedo, poca disciplina y una difícil organización a diez y siete. Esto les valió unos meses con un número de casos relativamente bajos en los jóvenes y extremadamente alto con los residentes en asilos y residencias. Así como la admiración o la crítica de otras naciones.
Pero también en este país la fatiga se extendió pronto en vista de las muchas restricciones que se convirtieron en la nueva normalidad. Las cacerolas de la alta burguesía y los descapotables de la derecha más rancia salieron a la televisión con su terraplanismo y banderas mil.
Según una encuesta, una buena cuarta parte de los ciudadanos considera ahora que las medidas son demasiado amplias. Un vaivén periódico de la vida pública, primera, segunda, posible tercera oleada no le durará a la sociedad indefinidamente, eso parece en tanto ponemos toda nuestra esperanza en una de las primeras vacunas, unas de las veinte que se están investigando y que ya tienen nombre y precio.
Yo la espero con la sana intención de ponérmela, al final es una cuestión de fe.
Paco Robles
Paco Robles se dedica al Partido Socialista y a la Memoria Historica, memorialista, historiador aficionado y buscador de verdades. Vocal de la AGRMH y Secretario CEP de Memoria Historica del PSOE de Granada.