Endecha II El pastor más triste que ha seguido el cielo, dos fuentes sus ojos y un fuego su pecho. Escrito por Francisco de la Torre
Soneto Soy como aquel que vive en el desierto, del mundo y de sus cosas olvidado, y a descuido veis donde le ha llegado un gran… Escrito por Juan Boscán
Soneto Dulce soñar y dulce congojarme, cuando estaba soñando que soñaba; dulce gozar con lo que me engañaba, si un poco más durara el engañarme; Escrito por Juan Boscán
A la tristeza Tristeza, pues yo soy tuyo, tú no dejes de ser mía; mira bien que me destruyo sólo en ver que el alegría presume de hacerme… Escrito por Juan Boscán
En una esperanza que salió vana Huid, contentos, de mi triste pecho; ¿qué engaño os vuelve a do nunca pudiste s tener reposo ni hacer provecho? Escrito por Fray Luis de León
A Felipe Ruiz En vano el mar fatiga la vela portuguesa; que ni el seno de Persia ni la amiga Maluca da árbol bueno, que pueda hacer un… Escrito por Fray Luis de León
Vuestra tirana exención Vuestra tirana exención, y ese vuestro cuello erguido estoy cierto que Cupido pondrá en dura sujeción. Escrito por La redacción
Contra un juez avaro Aunque en ricos montones levantes el cautivo inútil oro; y aunque tus posesiones mejores con ajeno daño y lloro; Escrito por Fray Luis de León
Al salir de la cárcel Aquí la envidia y mentira me tuvieron encerrado. Dichoso el humilde estado del sabio que se retira Escrito por Fray Luis de León
Oda a Francisco Salinas El aire se serena y viste de hermosura y luz no usada, Salinas, cuando suena la música extremada, por vuestra sabia mano gobernada. Escrito por Fray Luis de León
Éste que ves, engaño colorido Éste que ves, engaño colorido, que, del arte ostentando los primores, con falsos silogismos de colores es cauteloso engaño del sentido; Escrito por Sor Juana Inés de la Cruz
En perseguirme, Mundo, ¿qué interesas? En perseguirme, Mundo, ¿qué interesas? ¿En qué te ofendo, cuando sólo intento poner bellezas en mi entendimiento y no mi entendimiento en las bellezas? Escrito por Sor Juana Inés de la Cruz
Con el dolor de la mortal herida Con el dolor de la mortal herida, de un agravio de amor me lamentaba, y por ver si la muerte se llegaba procuraba que fuese… Escrito por Sor Juana Inés de la Cruz
Amor empieza por desasosiego Amor empieza por desasosiego, solicitud, ardores y desvelos; crece con riesgos, lances y recelos; susténtase de llantos y de ruego. Escrito por Sor Juana de la Cruz